Calma aparente en el ojo del huracan.
Ahora que ha transurrido no el tiempo prudente, pero si que el clima coincide para que las aguas duerman un poco, regresamos a la habitación usual.
Aún no me acostumbro al nuevo diseño del blog. Cuestiones de renovación, supongo. Esto luce bien, y mis dedos apuntan a escribir mucho, lo cual luce mejor.
Mes y medio sin alguna frace mía en este absurdo lugar al cual solía incurrir cada vez que algo en mi cabeza lo indicaba. Somos de una nueva etapa, esta que lanzó la convocatoria hace un mes y a la cual no respondí. No es una respuesta, es una noticia.
Incito a una plegaria por lo que se mantiene en la historia, por los que no han llegado, por los que se fueron y por los que están. Donde sea que se encuentren.
Me prohibo leer lo previo a esto pero siempre termino por hacerlo. ¿Y mi chica del camión? Sé que algún día yo bajaré para conocerla, sea quien sea.
Y esto es por todos, por los contribuidores, por los que nos han leido, por los que aún piensan k no sé k nos leen, y por toda esa gente que no lo hace pero que gracias a dios está conmigo. Yo me dedico a incrementar amistades, no a fomentar enemigos. Tengamós fé en la plegaria, ahora elevemos una bendición "Gracias Dios"